Chile
A Cristóbal (Las Condes, Chile, 1998) y a Violeta (Sort, España, 1998) no solo les une su pasión por el circo. En ambos casos, da la casualidad de que llegaron al mismo gracias a sus madres, que los animaron a apuntarse a clases de circo. Aunque la motivación de cada madre era diferente: en el caso de Violeta, para continuar una afinidad natural por las bellas artes, la música y las telas aéreas; en el de Cristóbal, para sacarlo del sedentarismo pertinaz al que le habían abocado los libros y los videojuegos.
También fueron diferentes la primeras sensaciones de cada uno en el circo a sus 16 años: para Violeta fue algo así como un flechazo y su progresión muy rápida; para Cristóbal, en cambio, la primera clase la recuerda como uno de los días en que más sudó en su vida, aunque por suerte la mirada de su madre dejó claro que no era negociable lo de continuar con las sesiones. Luego las historias siguen divergiendo, mientras que a Violeta sus padres le sugirieron que fuese a una escuela de circo, las caras de los de Cristóbal cuando aseguró que dejaba la carrera y se dedicaba al circo pasaron por varios colores antes de digerir la propuesta.
“Hahahahelp” es una historia singular, la de dos almas casi gemelas que se conocen en la escuela Ésacto’Lido y pronto descubren lo mucho que les une, sobre todo la necesidad de burlarse del mundo para tomárselo en serio. En ella, según sus palabras, podremos ver “brechas a otra realidad, la realidad de un juego que fue demasiado lejos, un universo en el que lo inimaginable es posible y lo absurdo necesario. Un viaje entre lo verdadero y lo falso que nos lleva a cuestionarnos la sacralidad del arte, de la escena y de la vida misma”.